Esta mesa de centro tiene un diseño clásico y robusto, ideal para espacios cálidos y acogedores. Está hecha completamente de madera en un tono nogal oscuro, lo que le da un aire elegante y atemporal. Su forma es circular, con una superficie gruesa y lisa que transmite solidez. La base está formada por patas anchas en cruz, que no solo refuerzan su estabilidad sino que también aportan un carácter escultórico sutil. Este estilo encaja perfectamente en interiores modernos con toques rústicos, escandinavos o contemporáneos, y combina muy bien con sofás neutros y textiles naturales como los que se ven en la imagen