Los carros de los niños se mueven por el círculo. La velocidad a que se mueven se decide con un dado. Si la ficha queda al lado de un material, el niño la puede coger. Quien recoja tres materiales distintos (madera, cereales y ladrillos) puede construir una de sus casas, en los espacios del pueblo. Después, debe devolver los materiales que ha utilizado. Si ya se han construido todas las casas, entra en juego el ayuntamiento. Quien reúna primero los tres materiales en su carro, construye el ayuntamiento y gana el juego.