La pérdida de colágeno está asociada a la aparición de arrugas, debilidad en uñas, cabellos y articulaciones.
El colágeno es una proteína fundamental para el organismo, encargada de mantener la piel elástica y sin arrugas. Esta proteína antiedad por excelencia se genera naturalmente en nuestro cuerpo; sin embargo, a partir de los 25 años se empieza a perder esa capacidad.
La pérdida de colágeno en nuestro cuerpo provocan los siguientes síntomas:
La disminución de la espesura de las hebras del cabello, aumento de la flacidez y pérdida de la elasticidad de la piel, surgimiento de arrugas y de líneas de expresión, aparición de estrías, piel fina y deshidratada, disminución de la densidad de los huesos como en los casos de osteopenia y osteoporosis, debilidad de las articulaciones y de los ligamentos.
Tomar colágeno ayuda en:
- Calidad de la piel y uñas: Ayuda a restituir la dermis, uniendo las células que componen la piel y desacelerando la aparición de arrugas. Además, puede aumentar el grosor y regenerar las fibras de la piel, lo que evita la aparición de celulitis y estrías. Fortalece las uñas evitando que se formen quebradizas y ayuda que sean más sólidas.
- Fortalece el cabello: puede retrasar este proceso y disfrutar tu cabello por más tiempo.
- Resistencia muscular: El colágeno es el responsable de darle forma al cuerpo y a los músculos.