Se trata de una de las piedras angulares del terror moderno que ilustra a la perfección el estilo de las novelas góticas. La historia gira en torno al abad ambrosio, un hombre pretendidamente virtuoso que en realidad está entregado a la lujuria. Mordaz y terrible al mismo tiempo, el monje no ha perdido un ápice de esa fuerza que fascinó al público ya desde su primera publicación