La caja M.2 USB-C está diseñada para albergar una M-Key o M+B Key NVMe PCIe SSD y convertirla en una unidad externa portátil USB 3.1 para una máxima utilización. Sin herramientas y sin necesidad de controlador, solo conéctelo y listo. Ideal para clonar archivos, realizar copias de seguridad de datos, reutilizar SSD M.2 antiguos y ampliar el espacio de almacenamiento.